Suena
el timbre de la puerta y tú dejas la colada, la broca del nueve o la tesis
doctoral, en fin, lo que quiera que tengas entre manos.
Al
otro lado de la puerta hay un chico vestido de rojo con una cajita para ti. Y
no, no es Santa Claus, que es del servicio de mensajería y te trae algo con lo
que alegrarte la mañana.
El
precinto es inconfundible: el envío viene de Planeta DeAgostini, y trae un
pequeño tesoro con el que enriquecer tu mundo Nancy.
No
es de extrañar que los amantes de las muñecas en general y de Nancy en
particular hayamos levantado las orejas, cual perrillos tras la puerta, desde
que nos enterásemos del lanzamiento de esta colección; no ocurre todos los días
que a una muñeca la vistan los más grandes de la moda, pero es que “Nancy es
Nancy”, y nada puede sorprendernos tratándose de una muñeca que, con casi medio
siglo de edad, sigue en el candelero.
Aquella
muñeca que otrora tuviera mirada margarita demuestra que no tiene ningún
complejo, -aparta Barbie, que voy- y sin problema se sube a la pasarela,
dejando en su viejo armario los pantalones de campana y el estilo setentero
para reivindicar su incontestable glamour de la mano de grandes como Hannibal
Laguna, Roberto Verino, Devota & Lomba o Ion Fiz (entre otros).
Es
innegable que, al margen del coleccionismo más purista, ese que nos lleva a
adquirir piezas de los setenta -quizás más que nada por la emoción de la “caza”-
a todos nos hace ilusión vestir de estreno a nuestras Nancys. Y es que una cosa
no quita la otra.
Bien
por los chicos de Planeta, que nos dan una alegría a los coleccionistas de
nuestra “Famosita” más querida. Porque, si Nancy ha sido capaz de traspasar el
umbral del nuevo milenio, lo justo es que lo haga con estilo, y no luciendo
trapos viejos.
LA
COLECCIÓN
Se
trata de un total de 40 modelos, repartidos entre diez diseñadores. Las entregas son mensuales con la suscripción,
incluyendo dos o más vestidos, y quincenales en el kiosco, con uno solo.
Lo
primero que agrada es la presentación de cada entrega: son unas prácticas
cajitas con apertura deslizante, tipo caja de cerillas, para que nos
entendamos, y que permite usar el vestido y volverlo a meter en su embalaje
original si así se desea.
Esto
resuelve el eterno conflicto del coleccionista: ¿usar o exponer? Pues podemos
hacer las dos cosas. A diferencia del típico blíster de cartón y acetato, ese
que nos obliga a romper el embalaje para disfrutar del artículo, la
presentación de estos vestidos permite su uso en la muñeca, para retornarlo a
su cajita cuando se desee. El vestido viene sujeto por su propio cierre a un
molde que reproduce el torso de la muñeca, y lo que hay que hacer para
extraerlo o recolocarlo es vestir o desvestir dicho molde. ¡Muy práctico!
Las cajitas con
tapa deslizante.
DISFRUTANDO
DE LA COLECCIÓN A TU GUSTO
Vestir
a la muñeca o dejar el modelo en su cajita no son las dos únicas opciones; como
si se hubiesen metido en la mente del coleccionista, los responsables de la
colección han puesto otras dos opciones a nuestra disposición. Así, podemos
exponer los vestidos en una vitrina, sobre unos maniquíes, o meterlos en un
armario. Y aquí es donde hay que hablar de las ventajas de la suscripción.
SÓLO
PARA SUSCRIPTORES
Ambas
cosas, maniquíes y armario, se pueden adquirir de forma opcional con la
colección, por sólo 2,50€. Es la opción
“Premium” de la suscripción. Vamos, lo que viene siendo un café con tostada,
sólo que te tienes que imaginar que el mes tiene 32 días, en vez de 31, y por
un desayuno más le pones un armario decente a tu Nancy. Además, por ese mismo
precio te llevas 40 cajitas de zapatos.
Imaginaos una vitrina con los vestidos expuestos aquí… ¡Hay
que conseguirlos sí o sí!
Ojito,
porque si, además, te suscribes antes del 31 de agosto, te llevas un vestido
exclusivo de Francis Montesinos que quita el hipo. Es de su colección “Spanish
Garden”, está realizado en gasa y lleva un precioso tocado de flores que ni
Frida Khalo. El Montesinos ha gustado mucho en Taller de Hadas, por lo
vaporoso, lo elegante, lo romántico y lo colorido. ¡Un imprescindible!
El espectacular vestido del diseñador Francis Montesinos
LA
GUINDA DEL PASTEL: TRES MUÑECAS
Una
morena, una rubia y una pelirroja. Tres Nancys exclusivas se llevan los
suscriptores de la colección.
La rubita llega con el envío número 6, la morena
con el 11 y la pelirroja con el 19.
Tres muñecas que no vamos a poder conseguir en tiendas.
O
SEA, QUE LA COSA QUEDA ASÍ:
Te
suscribes y te quedas tan tranquilamente en tu casa, esperando a que te traigan
a la puerta tu cajita mágica mensual. Y todos sabemos cómo nos alegra eso el
día, la semana y hasta el mes completo. Por suscribirte, te llevas tres muñecas
exclusivas, pero, si escoges la suscripción Premium, puedes optar a ampliar tu
colección “Nancyera” con un armario, 10 maniquíes y 40 cajas de zapatos.
Si
además eres rápido, te llevas el precioso vestido de Francis Montesinos, uno
que no vas a poder comprar en tiendas.
Tal
y como nosotros lo vemos, las ventajas de la suscripción son evidentes frente a
la compra en kiosco, (empezando con que
lo mismo no llegas a tiempo y te quedas sin alguna entrega, y terminando con
que es más cómodo que te lo lleven a casa). Pero eso depende de qué tipo de
coleccionista seas. ¿Lo quieres todo? ¡Pues estás tardando!
Nosotros
ya hemos recibido los tres primeros, y podemos dar fe de que están muy bien
presentados, e impecablemente terminados.
Las
reseñas de los vestidos las podéis ver aquí:
https://www.youtube.com/watch?v=7EYkNSyPuz4&feature=youtu.be
Y
toda la información, de primera mano, podéis recibirla bien entrando en la web
de Planeta, bien llamando al 93 495 39 68.
¡Enteraos
de todo aquí!